Unirnos como familia Colombo Galesa es algo que nos llena el alma de alegría. Recorrer un camino con nuestros niños a través de la catequesis nos permite evidenciar cómo se hacen conscientes de su responsabilidad como cristianos y lo bonito que es recorrer la vida de la mano de Dios.
El pasado viernes 17 de febrero, nos reunimos en torno a la ceremonia de la luz. Recordar que no solo Jesús es la luz de nuestras vidas llenó el corazón de las familias que compartieron un momento muy especial con sus hijos, reconociendo de qué manera y en qué circunstancias ellos también han sido luz para quienes los rodean.
Ser parte de la bendición del agua y la luz fue un espacio para agradecer a Dios y también para encomendar a Él nuestras necesidades y deseos desde la fe y la humildad, para pedir su protección y misericordia.
Poder dar la bendición a nuestros estudiantes con el agua bendita, elemento que representa el bautismo, y encender las luces como símbolo del recibimiento del Espíritu Santo, fue trascendental para los padres, quienes expresaron el amor infinito que sienten por sus hijos e hijas a través de este emotivo acto.
Confirmamos que cuando estamos unidos, todo es más significativo, así que nuestra celebración continuó con un hermoso ágape en el que las familias compartieron entre sí y disfrutaron de los alimentos que simbolizan el agradecimiento y amor de nuestro colegio hacia ellos.
«Una vez más Jesús se dirigió a la gente, y les dijo: —Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida» (Juan 8:12).